Cuidarse, no solo se trata de pensar en cuestiones físicas, como comer sano o cepillarse los dientes, sino también de tener una buena salud emocional.

Esto es algo muy importante para la vida, por ello, es esencial enseñarle a los más peques a cuidarse.

¿Cómo hacerlo? Existen diversas formas y hoy te compartimos algunos consejos que pueden ser útiles para este cometido.

La clave: enseñar buenos hábitos

Ya sea con atención plena, ejercicio o meditación, cuidar de uno mismo, cada día, es muy importante.

La actividad física, por ejemplo, aporta muchos beneficios para la salud, facilitando una vida mucho más saludable.

Es vital que animes a tus hijos a probar cosas nuevas para que encuentren una rutina que les funcione y les sienta bien.

Para enseñar buenos hábitos a los hijos, hay muchas formas, pero las más habituales son las siguientes:

Sé un buen modelo a seguir. Recuerda que tu hijo aprende de tus acciones, por lo que es vital que manejes tu propio bienestar. Si te sientes bien, tendrás más claridad a la hora de pensar en tus cuidados en la rutina diaria.
Aprovecha las herramientas gratuitas y que están a tu alcance.
Reduce el riesgo de llevar una vida poco saludable, tanto a nivel físico como emocional. Trata de mantener un hogar saludable; regula el uso de las redes sociales, habla con tus hijos, comparte tiempo con ellos.

Prepararse para los momentos difíciles

Todos pasamos por momentos difíciles alguna vez.

La recomendación es que elabores un plan que te permita ayudar a tu hijo a reducir el estrés y la ansiedad frente a situaciones adversas.

Ayuda a tus hijos a comprender que en la vida va a lidiar con cosas difíciles, pero si tienen la capacidad de elegir las formas de reacciones antes esas situaciones, pueden aprender a sobrellevar una crisis y estar mucho más tranquilos.

¿Cómo ayudas a tus hijos a cuidarse y tener una vida equilibrada en todos los aspectos?

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