¡Bienvenida(o)!
De la misma manera por la que nos preocupamos de nuestra salud o por que nuestra casa se mantenga limpia y ordenada, debemos preocuparnos por el planeta. Debemos inculcarles, además, el sentido de respeto por nuestro mundo a los más pequeños de la casa, para que, mediante vayan creciendo, ellos mismos sientan la necesidad de cuidar el que debe ser el hogar más sagrado de todos. Por esta poderosa razón, hoy te enseñaré cinco formas distintas para contribuir con el cuidado del medio ambiente. ¿Quieres conocerlas?
- Utiliza menos plástico
Las compras en el supermercado también pueden portarse en bolsos de tela o de papel. No necesariamente todos los refrescos deben ser bebidos con popotes. Se trata de realizar un verdadero cambio de hábitos.
- Reúsa
Si un jugo llega en un envase de vidrio ¡no lo botes! Puedes reutilizarlo como vaso, como florero o hasta como elemento decorativo si te propones darle algo de color con acrílicos. Las latas del café o de la leche también son así de versátiles: un contenedor de lápices o una guirnalda para el jardín ¡suenan bastante bien!
- Recicla
En casi todos los establecimientos se han colocado contenedores especiales para cada tipo de residuo. Respétalos y hazlos respetar. Si te es posible, organízate con tus vecinos o con las mamás del colegio de tus hijos para recolectar tapas de botellas, botellas, papel, etc. Sería una iniciativa bastante admirable.
- Ahorra agua
Mientras te enjabonas, las manos o el cuerpo, la cañería puede permanecer cerrada. Controla que no haya fugas en las tuberías y, de ser el caso, comunícate lo más pronto posible con un especialista que pueda darte una solución rápida y efectiva. Como bien dice el dicho “gota a gota, el agua se agota”.
- Controla el uso de energía eléctrica
Apaga las luces de las habitaciones que no lo requieran, desenchufa todos los aparatos eléctricos antes de acostarte, nunca dejes cargando el celular durante toda la noche. En los pequeños cambios, empiezan las grandes acciones.