Que nuestra familia consuma alimentos en óptimas condiciones, sin duda alguna, es uno de los objetivos diarios que tenemos las madres. Pero que estén impecables para el consumo, nos lleva a realizar todo un proceso de prevención, que incluye la desinfección primordialmente, sobre todo en los que se comen directamente. Parece complicado, pero es sencillo y muy bueno. Aquí les dejo mi proceso para mantener los alimentos limpios.
Aprende a escoger
Quizás no se dieron cuenta, pero es aquí el inicio de todo. Debemos seleccionar según la variedad de alimentos, por ejemplo: las frutas, deben ser seleccionadas en estado intermedio, no tan maduras porque se malogran rápido, ni tan verdes porque no se puede comer a corto tiempo. En el caso de las verduras, debemos optar por las que estén sin puntos negros, carcomidas o aguadas. Recuerda, además, verificar que no tenga gusanos pequeños.
¡Lávalos bien!
Primero lava tus manos. Luego utiliza un colador para quitarle la tierra o el polvo a los alimentos de consumo directo. Con abundante agua, sóbalos para que se vayan las imperfecciones superficiales. Luego colócalos en un recipiente para que se escurran.
Utiliza cloro
Este es uno de mis secretos para mantener los alimentos desinfectados. Quizás, algunos piensen que solo se utiliza para el baño, pero en realidad este producto, bien utilizado, es ideal para la cocina. Dentro del recipiente donde están tus alimentos reservados, llena agua y échale un chorrito de cloro – yo utilizo la marca Sapolio-. Luego vuelve al lavadero y soba los alimentos con este concentrado, después enjuágalos muy bien.
Sepáralos en recipientes especiales
Selecciona los insumos que vas a necesitar inmediatamente, los demás guárdalos en la refrigeradora, la cual te recomiendo desinfectar paulatinamente con cloro para evitar el cúmulo de agua y malos olores. Las frutas mantenlas a temperatura de ambiente y ponlas al alcance de todos.
Utiliza toallas pequeñas
Otras de las opciones que les comparto es tener trapos o toallas pequeñas limpias para tapar los alimentos mientras no son consumidos, ya que si los colocamos en recipientes con tapas, les impediremos botar los gases naturales, esto hace que maduren más rápido y se malogren.
Respecto a los alimentos enlatados, antes de consumirlos, lávalos, sí, échale agua y desinféctalos. ¿Por qué? Sencillamente porque irá directo al consumo. Recuerda que sobre esa lata ha caído polvo y han pasado bichos, así que hay que ser prevenidos antes de lamentar cualquier infección al estómago.
Recuerda que debes pedirle a todos los miembros de tu familia lavarse las manos antes comer cualquier alimento. De esta manera, evitaremos la contaminación de los insumos continuos y dolores de barriga.
Espero te hayan servido mis consejos. Déjame tus comentarios o consultas, estaré feliz de ayudarte.
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